domingo, agosto 26, 2007

Invisible

Hay tres lugares en donde me siento invisible: El ómnibus, las abarrotadas calles de Córdoba y la pista del club. En todo momento siento la incomodidad de estar un lugar que difícilmente me pertenezca, en cualquiera de los sentidos, por más que sean mi visión del ómnibus, Córdoba y la pista de baile.

Quiso un destino cruel de naturaleza humana que mis pasos errarán por un piso sucio de un lugar oscuro, en las frías horas de la madrugada, siguiendo un ritmo conocido y añorado, descontento con imágenes y sentires de sinsabores, contradictoriamente.

Destinado a ser un fantasma que contempla los avatares de un mundo que no comprende y no hace el esfuerzo por comprender, transito un valle de cuerpos y existencias efímeras, a golpe de ojo compuesto por pesadillas, locuras y sueños inalcanzables, que buscan salida, horas más tarde, a través de un espacio recóndito perdido entre las horas en que duermo. Con paso cansado y un vaivén, producto del groove o del devenir del coche por las rutas y calles, a duras penas compatible por el ritmo, me hago un pequeño espacio donde descansar del laberinto que acabo de recorrer. Siento una extraña fiebre, que sé no podré limpiarme.

¿Qué hay de mal en mí? No soy el único, de seguro. A simple vista veo otros tantos desafortunados de miradas perdidas y ánimos cabizbajos, que tratan de sobrellevarla a pesar de ser escrutados por todos los demás de nosotros. Somos invisibles, pero podemos vernos, aunque sea como mero reflejo de cada uno.

Levanto el vaso y bebo lentamente, tratando de disfrutar el amargo líquido. Una mueca cruza mi rostro, mientras siento como la bebida quema mi garganta. Horrible, indiscriptible, acompañado de un pesar ancestral que nace desde algún lugar perdido entre unas entrañas.

Ante presencias de silencios iminentes, no me dejo intimidar. Soy invisible. Un espectro rondando en una pista de baile, acompañado por la desidia de un futuro que no será, pero que disfruta el mutismo que le imponen, mientras la música prevalezca a todos los demás sentidos.

De todos modos, esta noche toca Carlos Alfonsín




This post's Soundtrack: Martín Avaro - Promo Set Agosto 2007. Minimal Techno

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